Esta es la imagen que preparé para el congreso de este año de la FAD. Se ha realizado el programa y otros elementos de comunicación y promocionales, para este evento que se desarrolla durante tres días.
He querido con las caritas que aparecen expresar la convivencia en una sociedad de lo diferente. He tenido luego ocasión de asistir a algunas de las conferencias y me parece que es un tema muy interesante. Es todo un reto para el futuro de las sociedades (nuestro futuro) aprender a convivir. Las dificultades y los retos, todos lo sabemos —pues lo estamos viendo todos los días— son muchos. Una reflexión que me surge es que lo mismo que existen (y cada vez se hace más visible una parte de ese problema) los problemas y la violencia dentro de las familias, esos mismos problemas se refleja en la sociedad que de alguna manera es una familia «grande».
Así, al igual que tenemos una obligación y un compromiso de estar atentos y observar los problemas que surgen en nuestra familia para solucionarlos cuando estamos a tiempo, también tenemos cierto compromiso como ciudadanos. Posturas alarmistas o derrotistas no facilitan mucho la convivencia. De ese compromiso de uno con su entorno es de donde surgen las posibilidades de disfrutar de él.
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