Recientemente he realizado esta ilustración para una cubierta del libro La memoria de Luis Rojas Marcos. Había gustado la propuesta para esta otra cubierta que realicé anteriormente y la editorial quería que trabajara en esa misma linea gráfica. Casi siempre disfruto la libertad de ser yo quien propone la idea, pero en este caso la persona responsable de la dirección de arte de la editorial tenía una idea bastante concreta del motivo que quería para ilustrar este título.
He realizado este encargo íntegramente en illustrator; cada vez me encuentro más cómodo trabajando en este programa. Siento que el programa tiene infinidad de posibilidades y herramientas que nos permiten encontrar normalmente varias maneras de hacer aquello que nos proponemos. Me gusta, cuando encuentro un rato libre, seguir alguno de los muchos y buenos tutoriales que podemos encontrar en la red. Explorar como otros ilustradores han realizado un trabajo, nos permiten ampliar nuestra perspectiva, adquirir soltura y familiaridad con el programa y adquirir recursos que posiblemente podamos aplicar en próximos trabajos.
Para moldear las palabras según los pliegues que dibujan el cerebro he seguido básicamente los siguientes pasos:
- Colocar una imagen de un cerebro con los pliegues bien definidos colocándola como fondo, aplicándola transparencia y bloqueándola. Este imagen será una referencia para trazar una lineas que serán las lineas de base que seguirán las palabras.
- En algunos casos he creado una malla envolvente de ese objeto, para luego modificarlo y deformarlo arrastrando los puntos de dicha malla.
- He recurrido también a la gran variedad de efectos de deformar que nos permite illustrator (en el menú efectos), para conseguir dar cierta perspectiva y volumen a las palabras que dibujan los surcos del cerebro.
- En otra capa he dibujado el perfil de la figura humana y las letras y líneas sueltas que parecen arrastradas por el viento. Estos elementos dan un toque más dinámico y de comunicación e intercambio entre el interior y exterior, que quería que tuviera la ilustración.
Creo que la impresión final de esta ilustración dentro de la cubierta, de cuya composición tipográfica no me he ocupado yo per ocre oque es muy acertada, es de limpieza y claridad. Sin embargo me ha sorprendido la cantidad de términos que contiene la ilustración.
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