Trabajo para El Bosque desde sus comienzos, es decir desde cuando sólo era un proyecto en la mente de Pedro. Fue por el año 2000 y el proyecto nos entusiasmó a todos los que participamos en él por aquel entonces. Ese entusiasmo ayudó a superar muchas dificultades en aquellos primeros tiempos. Pretendía no quedar limitado a ser un hotel de turismo rural sino que aspiraba también a ser un centro de desarrollo humano, dando una gran importancia a los cursos y actividades. El Bosque abrió en 2002 y lleva ya por tanto unos años de rodaje. Creo que hoy El Bosque es más conocido como un hotel rural que cuenta con un agradable spa y un cuidado restaurante pero mantiene algunas de estas actividades como meditación, yoga, Tai chi... para aquellas personas que quieren aprovechar sus vacaciones para conocer o profundizar en estos ámbitos.
Desde el principio me he ocupado del diseño gráfico: identidad corporativa, folletos, carteles, carta de restaurante, y en este último año el diseño de la web que luego ha desarrollado la empresa Alkimik.
Casi comencé mi andadura como diseñador autónomo de la mano de El Bosque y el tener un cliente estable y fiel ayuda mucho a comenzar una carrera profesional en este campo (imagino que como en cualquier otro).
Esta labor ha sido para mi un gran aprendizaje en muchos sentidos y he conocido personas que me han enriquecido. Algunas siguen trabajando ahí día a día, otras muchas han seguido su camino en otras direcciones.
Un recuerdo agradecido para todos.
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